El CI en investigación clínica debe ser un procedimiento muy formal a diferencia de lo que ocurre en la práctica médica habitual, donde en muchas ocasiones el consentimiento queda aceptado en el mismo
hecho de asistir a la consulta y sólo se solicita en casos
donde exista un procedimiento que implique riesgos, como una cirugía o un procedimiento invasivo.
En menores de edad, en personas con retraso mental y aquellos que se encuentran inconscientes, el consentimiento deberá solicitarse a los familiares más cercanos o al representante legal; si faltasen, se solicitará a las autoridades competentes.